miércoles, 18 de junio de 2008

Vacío

Creo que el concepto “vacío” siempre ha tenido una mala connotación, probablemente porque es el extremo opuesto a la abundancia, suena obvio, pero no siempre lo es. Los pensamientos por buenos o malos que sean de alguna u otra forma harán que llegue el momento en que la anhelada abundancia se vuelva turbia y caigamos engañados en nuestros propios pensamientos sin que nos dejen avanzar o dilucidar más allá de lo que vemos, o mejor dicho, de lo que pensamos. Con el tiempo se hace evidente y por más que seamos reacios a estos pensamientos nos veremos autoengañados hasta el momento que no soportaremos esta abundancia corroída por pensamientos que, por lo general, son las raíces de sentimientos que se impregnan en nuestro ser y se apoderan poco a poco de nuestra voluntad, cegándonos y encadenándonos a una verdad que muchas veces, a pesar de ser posible, no la es. Los papeles se invierten, uno ya no maneja su vida, si no que ella nos maneja a su propio antojo, guiados por sentimientos y pensamientos no muy gratos, mas creo que para evitar semejante destino es necesario sumergirse en un vacío de pensamientos, de sentimientos, de nosotros mismos. ¿Irónico, no?, pero creo que muchos, si no todos, sabemos que es así. No me refiero a un vacío existencial, puesto que eso es muy egoísta, simplemente un vacío que repare nuestras mentes aturdidas por oleadas de pensamiento que simplemente nos desviaron del camino. Quizás sea un tema de sanidad mental, como me dijo la Dana una vez. ¡Claro!, pero uno no puede no pensar en algo, mientras ese algo te sigue buscando y no me refiero a pensamientos que deambulan en la cabeza, si no que a estímulos del mismo entorno, de esas que te agarran de los sentimientos. Entonces, ¿qué viene después?, ¿de qué sirve olvidarte un día si al otro te tuercen la mano y te quedas con la venda en la mano, mirando el cielo para después dar unos pasos y volver a taparte los ojos y andar a ciegas de nuevo? ¿De qué sirve olvidar por una o dos noches si a la tercera te desvelas de nuevo? ¿Para qué optar por una distracción o solución temporal e imbécil si el opio sigue ahí? Probablemente el vacío es algo que sirva muy bien, siempre y cuando se deje la venda en el suelo y se siga hacia delante.

Por ahora, simplemente nutrirse del tiempo y si el entorno no cambia, hacerlo cambiar por las malas. =)

Photobucket

No hay comentarios.: